¿Que por qué te quiero?

¿Que por qué te quiero?

Y me preguntas por qué me fijé en ti.
Quizá fue ese modo de mirarme,
porque aunque lo calles sé que es especial.
Esa forma de sonreír,
sin dejar momento alguno
esa coquetería innata,
que sabes tan bien sabes usar.
Aquel galán que por esa misteriosa mirada
y por lo largo de tus pestañas,
se escapa de tu alma e invade la mía,
llenándola de deseos.

¿Por qué Dios se dedicó a crearte ?
¿A dar su tiempo en formar cual obra?
Esa manera de cerrar tus ojos
¡Qué fugases son esos momentos!
Mas cuan amplificados se vuelven en mi corazón
¡Cómo desearía ser noche !
Y que tú fueras mi luna y así con estrellas rodearte
y sellar con un beso tu luz.

Ojos más bellos hay,
pero ninguna mirada se compara a la tuya.
Por eso el universo sigue expandiéndose,
porque ya no existe
lo que merezca que tus soles se posen en ellos.

Vivamos como el ajedrez:
Tú siendo mi rey y yo, tu reina,
para así cuidarte.
Y despleguemos nuestra soberanía
sobre los otros amantes.

Y regálame el sabor de tus labios
y la cercanía de tus manos en un abrazo.
Bríndame el placer de tu compañía,
porque el silencio solo basta
si se comparte contigo.

Y siente la fuerza de mi amor en tu pecho,
y deja que cual gravedad a la tierra,
este amor te traiga hasta mí.

Este ha sido el poema más reciente que escribí, fue hecho el 26 de Abril, para Felipe Diez, un niño al cual le tengo bastante cariño.